Happy Humble Hermit- Fantasma a plena vista

Eso es cierto, es muy difícil ayudar a alguien que está en la plantación, literal, están hipnotizados y lavados de cerebro, actúan como zombies, obedecen como perros y hacen caso a lo que se les presente, yo realmente he tratado de ayudar a varios compañeros, desde la preparatoria incluso, y lo único que recibi fue burlas, a día de hoy lo he entendido, MGTOW no es para todos los Hombres ni para todas las mentes, algunos incluso quedan locos tras digerir la BlackPill, no pueden soportar toda la crueldad de la verdad.

En cuanto a interpretar un personaje, al menos en mi caso, soy el mismo tanto en internet como en la vida real, no me importa una m13rd4 lo que les pase a una NPC, lo he dicho tanto en internet como en la vida real, ese es quien soy, un Hombre ya realmente indiferente y neutral hacia muchas cosas, tanto es así que he creado una especie de pseudo-normas propias:

1. Sigue tu propio camino
2. No interfieras en el camino de los demás
3. Aquel que te esté estorbando, apartalo.

Cómo he dicho son una especie de pseudo-normas, pero creo que engloban bien al MGTOW que ya ha estado en la filosofía bastante tiempo, te das cuenta que gran parte de las veces solo te puedes apoyar a ti mismo y dices, al diablo con los demás y con lo demás, solo me enfoco en mi y eso está bien, pero a pesar de eso siempre me gusta hechar unas palabras de ánimo a quien las necesite.

Excelente ???

Recuerdo una historia:

Un Hombre buscaba el camino hacia su libertad y se encontró con un sabio ermitaño.
El Hombre le preguntó al ermitaño:

_ ¿Podrías indicarme el camino hacia mi libertad?

El ermitaño, señalando con una de sus manos, le dijo:

_ Está por allí.

_ Gracias!
Respondió el Hombre.

Siguió el camino indicado por el ermitaño y se encontró con un grupo de sujetos quienes lo golpearon hasta dejarlo malherido.
El Hombre se puso de pié y volvió hacia donde estaba el ermitaño. Cuando llegó, le preguntó:

_ ¿Conoces otro camino hacia mi libertad?

El ermitaño le respondió:

_ Si, es por allá.
Señalando con su otra mano en la dirección contraria a la anterior.

El Hombre siguió la dirección indicada y nuevamente se topó con otros sujetos que lo golpearon, esta vez mas duro que antes.
A duras penas ya, el Hombre volvió a ponerse en pié y se dirigió hacia donde estaba el ermitaño.
Le dijo:

_ Primero me mandaste en una dirección y me golpearon, luego me mandaste en otra y también me golpearon, ¿Quieres decirme de una vez donde está el camino hacia mi libertad?

Entonces, el sabio ermitaño respondió:

_ Si, te lo diré...el camino hacia tu libertad está allí...DESPUES DE LOS GOLPES.